¿Dónde quedan las Leyendas?
Ya son varias las leyendas que se han quedado en por el camino y que han hecho que, los amantes de la guitarra distorsionada, el bajo crudo, la batería sonando como si arreglasen un armario por dentro y la voz desgañitándose al grito de «rebelión», nos quedásemos un poco más huérfanos