Crónica del 13 de agosto de 2020 – Noches Mediterráneas
El Kanka es uno de esos magníficos cantautores que nos gusta escuchar cuando tenemos un día digno de celebración o que, por el contrario, sirve de alivio ante días más propios de “Pierre Nodoyuna”. Quizá ese buen rollo, sumado a unas letras tan sinceras, originales y cargadas de verdad es lo que hace que El Kanka sea, a día de hoy, uno de los cantautores más relevantes del panorama musical nacional.
Pero, centrándonos en el concierto que tuvo lugar en las inmediaciones del Puerto de Alicante, en la denominada Zona Volvo, vamos a transmitir, como podamos, porque a veces las palabras se quedan cortas, la experiencia tan mágica que nos hizo sentir El Kanka esa noche, donde la palabra coronavirus se paró por un momento para dar paso a esas sensaciones que solo la combinación entre alegría, música y noches de verano puede causarnos.
Empezamos poniéndonos en situación: El Kanka y su guitarra, de pie, frente a un número bastante considerable de personas que, sentadas siguiendo las distancias de seguridad requeridas y la mascarilla puesta, aplaudían con ilusión ante los primeros acordes que sonaron en directo.
El tema con el que comenzó no podría ser otro que Sabéis quiénes sois, tema originado en la cuarentena pasada, debido al COVID-19, y que destaca por la gratitud del Kanka con ese “gracias por el abrazo constante”. Gracias a ti, Kanka, por tus disparates y por tu verdad.
El concierto se desarrolló con un recorrido de varios temas de sus diferentes trabajos, no dejando a nadie sin un tema de cada disco. Asimismo, entre canción y canción no faltaron las risas del Kanka, que nos demostró ante el escenario lo bien que se lo pasa haciendo de su pasión un trabajo, aspecto que todo el público agradecemos (y que sea por mucho tiempo, por favor).
Las canciones se enlazaban con anécdotas que daban un toque especial y ameno a la noche, pues no faltaron guiños a noticias actuales, historietas cargadas con toques de humor y, hasta una versión de Bustamante dedicada, de forma irónica, a su manager y amiga, María.
No faltó el culto a cuerpo con canciones como A dieta de dietas o Guapos y guapas. Estos dos temas, en concreto, destacan por sus letras realistas y con toques críticos a través del humor y, el mismo artista, a través de su directo, nos invitaba a disfrutar de la vida y a cuidarnos por dentro, sobre todo. Dí que sí Juanillo, ¡vivan las imperfecciones y la panceta en la ensalada!
En general, y por suerte nuestra, vivimos una experiencia realmente gratificante en la que creemos que, todo fan del Kanka, no se quedó con el mal sabor de boca que ocasiona cuando no tocan tu tema favorito. El Kanka intentó hacer un repaso profundo de sus grandes éxitos (aunque, ¿qué canción de este artista no lo es?) y lo combinó con su humildad, su humor y su manera de hacer magia, tan propia de este cantautor que, con solo su presencia y una guitarra, crea un entorno de buen rollo y alegría realmente especial. Solo esperamos disfrutar de tu sufrimiento arte y buen hacer durante mucho mucho tiempo.
