Cain’s Dinasty es un grupo alicantino de power metal compuesto por Álex Ramirez, Andrius MW, Benansio Thrash, Joaquín Leal y Rubén Picazo. Durante sus 16 años de historia, han grabado numerosos trabajos y han actuado en decenas de conciertos, incluso en el plano internacional. Charlamos con Rubén, cantante del grupo, para conocer un poco más del pasado, presente y futuro de esta banda.
Pregunta: En vuestra web os auto clasificáis como «power metal vampírico, con toques de speed metal y metal progresivo». ¿Cómo le explicaríais vuestra música a alguien totalmente ajeno a este mundo?
Rubén: No nos gusta encasillarnos en un solo género; yo escucho música de muchos estilos, y al resto de mis compañeros les pasa lo mismo. De ahí lo de “vampírico”: una mezcla de muchas sangres. En esta última etapa nuestras canciones han contado historias de vampiros, más oscuras, alejadas de las temáticas clásicas del power metal.
P: ¿Cuáles son vuestras principales influencias?
R: Aunque nuestros principales héroes son del metal clásico, queremos sonar actuales. De nuevo esto varía mucho entre componentes. A título personal, mis referentes son Iron Maiden.
P: ¿Algún artista español?
R: (Silencio) Ese silencio lo dice todo (risas). Barón Rojo o Tierra Santa por decir algo. Cain’s ha apostado siempre por el inglés, en la línea de sus influencias.
P: Contáis con cuatro álbumes, en una carrera de unos 16 años, ¿qué ha cambiado desde entonces?
R: Los tres primeros discos fueron compuestos íntegramente por mí. A partir de ahí, todos los miembros han compuesto y participado más en la elaboración de los temas, y este es el mayor avance.
P: ¿Cómo ha rotado vuestra plantilla? ¿Algún truco para mantener el grupo durante tantos años?
R: Cain’s comenzó en la Universidad. Después, algunas personas toman rumbos diferentes, la gestión del tiempo libre es más complicada y es necesario cambiar de músicos. La clave es ser paciente y realista con el tiempo que puede dedicar cada miembro. En la actualidad me siento afortunado por el nivel de compromiso en el grupo.
P: ¿Qué podemos esperar de vuestros nuevos trabajos? ¿Cuándo verá la luz este nuevo proyecto?
R: Es lo mejor que hemos hecho hasta el momento, contendrá canciones compuestas por todos los miembros (una de ellas en español) y será la conclusión de Eva. Todavía queda mucho trabajo, ya que queremos hacer algo muy especial. Verá la luz a principios de 2021.
P: Los conciertos son el momento de máxima adrenalina de un grupo. En vuestro caso, incluso habéis tocado en el plano internacional con una gira por Japón. ¿Cuál ha sido vuestro concierto más especial?
R: Los tres conciertos de Japón fueron muy especiales, pero el segundo, en Nagoya, fue increíble. La sala estaba completa, y la gente cantaba las canciones tan fuerte que nos costaba concentrarnos. Sentimos algo muy especial; esa noche no se nos olvida.
P: La crisis de la Covid-19 ha afectado gravemente a todo tipo de artistas, trabajadores del mundo del espectáculo y, cómo no, a los músicos. ¿En qué sentido os ha afectado a vosotros? ¿Ha sido un golpe duro o una pausa inspiradora y para coger aire?
R: Ha sido duro en el aspecto económico; algunos han entrado en ERTE, otros hemos tenido que dejar de trabajar. A nivel de grupo teníamos conciertos en Madrid, un festival en Portugal… Esto deja un año en blanco, un gran vacío. Tratamos de hacer un balance positivo y aprovechamos para pulir al máximo el nuevo disco. Ha sido un tiempo muy reflexivo.
P: Por último, ¿algún mensaje para los lectores de Música Zero?
R: Invitarles a que nos escuchen en nuestras plataformas de streaming y nuestras redes sociales. Cada vez que nos comparten, cada mensaje que nos hacen llegar… es muy especial. ¡Ojalá podamos vernos pronto en concierto!