Más de 45.000 asistentes se congregaron del 11 al 13 de abril en las inmediaciones del circuito de Jerez, para celebrar con alegría y efusividad la llegada de la primavera y la personificación de esta en forma de festival.
El Primavera Trompetera, en su 5ª edición, dejó patente su enorme crecimiento año tras año tanto a nivel de afluencia de público, que disfrutó enormemente del buen ambiente, como a nivel organizativo.
Todo comenzó el jueves 11 de abril donde cientos de personas se reunieron para disfrutar con las divertidas letras de Los Calambres además de cantar y bailar con el arte jerezano de Tomasito, que dio la bienvenida a base de taconeos a los más madrugadores.
A la mañana siguiente se intensificó la llegada masiva de personas que se acomodaban en el camping con un ojo puesto en los escenarios. Esos escenarios que horas después serían ocupados por artistas de la talla de Narco, Def Con Dos y Sociedad Alkoholika que pusieron patas arriba al personal. Luego vino Miguel Campello, que como de costumbre sacó a relucir su pureza y dejó claro que es un bicho en el escenario. No podemos olvidarnos de la fuerza y la locura de los Mojinos Escozios y las cervezas del Sevilla.
El ambiente cambia cuando aparece SFDK, los versos del Zatu que hacen vibrar y alzar las manos a los presentes hasta la saciedad… ¿Quién diría que hace poco cumplieron 25 primaveras?
Desde Jamaica llegó Alborosie, mostrándonos con naturalidad el dulce veneno del reggae a altas horas de la madrugada, la despreocupación y el buen karma invadían los escenarios.
El plato fuerte de la noche estaba por llegar, El Canijo de Jerez volvía a su tierra y como de costumbre no defraudó, en su casa, con su gente… En definitiva, lo dio todo. Desde canciones del manual de jaleo hasta grandes éxitos garrapateros y como no podía ser de otra forma, con Migue Benítez siempre en el recuerdo. El concierto acabó con el canijo navegando entre el mar de gente, ambas partes entregadas y en perfecta armonía. Mientras tanto, en el escenario Libertad, los canarios Locoplaya ofrecieron a su público un concierto muy hablado por los que decidieron seguir los temas de este grupo que conquistó tanto a sus fans como a los que decidieron disfrutar de su memorable show.
No podían faltar tampoco Natos y Waor, Trashtucada o Les Castizos, que con su energía cerraron la noche del viernes y dejaron a los más trasnochadores sin un gramo de fuerzas.
A la mañana siguiente la temperatura era perfecta y el sol proclamaba el comienzo de un gran día. El ambiente en la zona de acampada primavera, como no podía ser de otro modo, era de compañerismo, alegría, libertad y buen rollo, personas de todas las latitudes del país disfrutaban del buen ambiente. En la zona de caravanas las personas descansaban en sus porches mientras se preparaban para afrontar otra tarde-noche que prometía no defraudar.
En los escenarios nos esperaban artistas como Toteking, que con sus rimas levantaba al público una y otra vez, el rock mítico de Reincidentes, Dellafuente y su trap que enamoró a muchos e hizo retumbar al festival al completo y Nach, desde Alicante, creando conciencia social con sus potentes letras. La energía se notaba eléctrica y todo fluía de forma natural, pero aún quedaban actuaciones que marcarían un antes y un después en las almas festivaleras que acudieron al Primavera Trompetera Festival.
Y así fue, cuando la Mala Rodríguez salió a escena y mostró a los presentes quién mandaba ahí. El público se entregó en cuerpo y alma a ella y a su espectáculo. Clásicos como Tengo un trato o Tengo lo que tú quieres hicieron que el público presente en Jerez de la Frontera disfrutaran de lo que su paisana es capaz de hacer sobre un escenario. El show era suyo y nuestros corazones también. Acompañada por un magnifico equipo de bailarinas, se adueñaron de la noche con poderío.
El ambiente volvió a subir con la llegada de Apollo 440, que recién llegados desde Liverpool y con su mezcla de drumm and bass y rock, lograron que miles de personas alzáramos nuestras manos y disfrutáramos de su música.
La noche terminó con artistas como Jonas Rathsman, Audiojack, Xambea o M.E.M.O que con su electrónica consiguieron que muchas personas permanecieran gustosamente en la pista de baile hasta la mañana del domingo.
A la mañana siguiente, poco a poco con calma y tranquilidad, la multitud fue recogiendo sus tiendas de campaña, abandonando en cuentagotas este magnífico festival que mejora con los años. Llama la atención el aumento de festivaleros a este evento que sigue manteniendo su auténtico estilo trompetero, que marca el inicio de la primavera y alegra las almas y corazones de aquellas personas que se acercan a disfrutarlo.
Redacción: Manuel Gómez González
Fotografía: Enrique Echeverría