¡Vaya concurrencia! Cuatro grupos en una sola noche. Y el nexo en común, el uso de la llengua, el valencià, y esto es algo destacable, ya que debería potenciarse más. Cuatro grupos jóvenes, bandas emergentes que se reunieron esa noche para mostrar de qué están hechos. Tres grupos de rap y uno de ska-punk ¡Vamos allá!
El concierto empezó fuerte con los Fuckin’ Aixà, los raperos Carlman y Marc, acompañados de Dj Fona. Tres jóvenes con mucha fuerza, que empezaron con timidez pero que supieron caldear el ambiente de la sala sin mucha dificultad. El conjunto, de apenas un año de existencia, nos ofreció un concierto que destilaba actitud y ritmo. Sus letras estaban cargadas de crítica social, a la que abordaban desde una perspectiva gamberra e irónica, con su rap que ellos mismos definen como “de trinchera” y con esos tintes de denuncia de Los Chikos del Maíz. Este verano van a grabar su primera maqueta, ¡así que estaremos atentos a lo que nos pueden ofrecer!
Pasamos casi sin respirar al siguiente grupo, Vicen-T, otro rapero valenciano con algo más de fuerza y soltura en el escenario, ya que en total acumulan 10 añazos de experiencia. Durante el concierto fueron subiendo al escenario varios raperos más a hacer unas colabos (colabos ¡yeah!), un total de 5 personas acompañaron a Vicent, líder del grupo, entre ellos Marc (Fuckin’ Aixà), que volvería a hacer una colabo con los de La Caixa de Gel (parece que no le gusta bajar del escenario) ¡Todo el mundo tenía su hueco! Los Vicen-T nos dieron un conciertazo más callejero y con un ritmo rápido gracias a las bases del dj, Javato, y al talento de Vicent.
Los Embolicats llegaron justo a tiempo para dejarnos ver los fuegos artificiales, ¡pero no por llegar más tarde brillaron menos! Este peculiar cuarteto fue a tope desde el principio, dejándose la piel en el escenario y transmitiendo esa energía explosiva e imparable a todo el público. Con sus rimas gamberras y divertidas y sobre todo con mucho morro, supieron compensar la falta de público de ese momento pasándoselo ellos mejor que nadie y haciendo honor a su nombre.
Y por último, pegamos un cambio de género brutal y se suben al escenario los de La Caixa de Gel. Este grupo ya es algo conocido en el mundillo alicantino, hasta a mí me habían hablado ya muy bien de ellos. Pero nada me había preparado para lo que iba a ver. Prácticamente una hora de ritmos salvajes, una mezcla de tantos estilos como componentes tiene el grupo: ska, punk, rock… mezclados con valentía y mucha jeta. Subieron a tope la temperatura de sala tocando todos los temas de su disco, Somnie, metiéndose al público en el bolsillo desde el minuto cero. El grupo, bastante joven, destaca sobre todo por el talento de sus (muchos!) componentes y por la fuerza que tienen. ¡Si al final hasta el cantante se metió en un pogo! Alucinante.
Al final salí de la sala con el cuerpo lleno de energía, como si me hubiesen dado una descarga eléctrica. Sinceramente disfruté muchísimo de la noche y de los diferentes estilos de estos cuatro grupos.
Para conocerlos un poquito más