12 de Julio de 2014, ¿Destino? San Fulgencio.
Donde un año más, este pequeño municipio de la provincia de Alicante nos deleita con una jornada del rock más destacado de nuestro panorama actual, con una ventaja mencionable: este año el recinto abre sus puertas de manera ¡totalmente gratuita!
Con esta condición, ¿quién puede resistirse a acudir y darlo todo? Además, este año contábamos con la zona de acampada también gratuita abierta desde el viernes 11 de Julio y hasta el Domingo 13, cosa de agradecer después de una fiesta intensa cargada de metal, a pesar de la distancia a recorrer entre recinto y zona de acampada, como ya ocurría en la edición anterior.
¿Hora clave? 18:00h. Apertura de puertas.
Al llegar al recinto se pudo observar la expectación del público a pesar del calor y el intenso sol y cómo poco a poco la gente se iba congregando en la misma entrada.
Dentro, observamos en el mismo lugar que en ediciones pasadas la zona de venta de bebida y comida, la cabina de tickets para adquirirla, además de la zona techada para huir del calor y tiendas con merchandising y ropa para los más atrevidos.
Se va acercando la hora de comenzar a gritar, saltar… las 18:30h. El público se va acercando al escenario para disfrutar del primer grupo y espectáculo de la tarde-noche.
Papa Serpiente
Esta banda de Hard ‘n’ Heavy murciana comenzó su espectáculo en la hora cumbre de sol y calor, pero no frenó a la banda ni a su público que se animó con el repertorio ofrecido en esta apertura de festival.
Por suerte y a pesar de ser la primera, no tuvieron problemas técnicos destacables así que pudimos disfrutar de un concierto lleno de furia y entrega.
Edhellen
Una vez acabado Papa Serpiente, vamos viendo como cada vez se aglomera más gente en torno al escenario,favorecida por la bajada ligera de las temperaturas. El público esperaba a la banda alicantina Edhellen, grupo de Power Metal con toques progresivos que, tras meses de inactividad en el escenario preparando nuevos temas, hoy nos presentaban varias sorpresas que no harían sino las delicias de su público más entregado y del poco conocedor de la misma.
La primera sorpresa fue la presentación oficial de su nuevo integrante: Christian Moressi a la segunda guitarra y formando el dúo de las seis cuerdas de la banda junto con Dennis Felperlaan,que tras 10 meses de inactividad vuelve con más energía que nunca.
Con cada tema nos sorprende la madurez de los alicantinos sobre el escenario y su fuerza de interpretación. Cómo no, los problemas técnicos asolaron a esta segunda banda al inicio del concierto, pero no hizo sino otorgar más fuerza a un espectáculo que nada tiene que envidiar a los grandes del género, ya que a pesar de ser un concierto mayoritariamente de temas de su primer álbum de estudio, sonaban con la frescura de una renovada banda.
Otra sorpresa que causó el intercambio de miradas y sonrisas entre en el público fue la versión del clásico de Nino Bravo «Un beso y una flor» que nos brindaron, animándonos a cantar, y es que los grandes nunca pasan de moda.
Como último secreto a voces, tenemos la presentación de su nuevo tema «De Sangre y Sal», con el que el grupo nos presentó su nuevo estilo con el que no quedó nadie indiferente en San Fulgencio, acabando su concierto con un balance positivo a pesar de los problemas técnicos sufridos al comienzo y el transcurso del concierto.
Somas Cure
El calor sigue bajando, pero no es ni notable ante la afluencia de gente al recinto del festival para ver a estos madrileños, banda de Hardcore que,desde el comienzo del concierto, sorprendió por su fuerza haciendo vibrar y saltar a un público que no tardó en entregarse a formar un gran «pogo» giratorio al ritmo de los temas de la banda, disfrutando de un espectáculo que consiguió mover a casi todos los presentes.
¿La clave?
La voz, cuidada, pero a la vez con fuerte técnica gutural y los instrumentistas, conjuntamente a los pocos fallos técnicos que tuvieron nos dejan un balance muy positivo para estos madrileños que quedaron encantados con el público de San Fulgencio al igual que el público con ellos, introduciéndonos en lo que sería el comienzo de la parte cañera de este festival
CRISIX.
Con el público más caldeado que el propio ambiente, realiza su entrada la banda Trash metal de Igualada Crisix, la cual sube al escenario con ganas de no dejar a nadie indiferente.
Destacamos la fuerza de interpretación de su cantante Juli Baz(Bazooca), llegando a tonos realmente agudos, incansable ante la entrega de un público tanto a la música como a la fuerza de la misma realizando «pogos» y mucho «headbanding» como corresponde al estilo.
Un detalle curioso que pudimos observar en el transcurso del espectáculo fue la aparición de un hinchable de ballena que acabó sobre el escenario,empujado por el público, causando las risas y la expectación tanto de la banda como de su masivo público a pesar de ser la hora clave para reponer fuerzas para lo que seguía por venir en este festival.
La gente vibró, saltó, gritó y cantó los temas, dando otro pequeño balance positivo a esta banda que continuó preparando el terreno hacia los cabezas de cartel.
Vita imana.
En espera de los Madrileños Vita imana, reponiendo fuerzas y cogiendo buen sitio para la acción, observamos como parte del público se divide a la firma de discos de Somas Cure, donde los madrileños observaron más de cerca si cabe, la entrega de Sanful a su actuación.
Tras esta firma de discos disfrutamos del inicio del quinto concierto de la noche de mano de Javier Cardoso y unos fuertes Vita imana que repitiendo su paso por este festival, desde el primer minuto sobre el escenario, hicieron vibrar a la gente como solo ellos saben.
¿Secreto?
Dinamismo acompañado de una puesta en escena transmitiendo fuerza y entrega, hacen de Javier Cardoso y sus chicos uno de los espectáculos más esperados de la noche.
Tampoco faltaron sorpresas de mano la banda cuando su cantante invitó a subir a Juli Baz (cantante de Crisix) de nuevo al escenario, con el cual conjuntamente, otorgaron más fuerza si cabe a una conclusión de concierto demasiado temprana para muchos de los asistentes que disfrutaron del repertorio más clásico de la banda, con temas como «Animal» «Romper con todo» o « Un nuevo sol» acompañado de la presentación de su nuevo disco Oceanidae, álbum que nos da una visión con mucha fuerza de esta banda,volviendo a épocas anteriores de la misma y que poco a poco revoluciona el panorama musical desde su salida al mercado.
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Mientras disfrutábamos del tremendo espectáculo de los madrileños pudimos ver que muchísimo público fan y no tan fan del grupo de groove/trash/hardcore se agolpaba como si de pequeños juglares se tratara en la firma del cabeza de cartel de la noche : Saurom. Firma no obstante,que duró durante todo el concierto y prácticamente la totalidad del descanso previo a los valencianos Noctem,siendo la firma más larga de la noche, y que hizo saborear el calor y el entusiasmo del recinto a los juglares gaditanos.
Noctem.
Tras esta firma y el gran espectáculo ofrecido, llegaba el turno del penúltimo grupo de la noche : Los valencianos Noctem, siendo el pequeño espacio en este festival para los usuarios mas «Blackers», no siendo habitual en festivales tan cortos en comparación a otros de su misma estructura (como Leyendas del Rock) o dedicados al propio género, siendo un punto muy a favor para esta edición del Rock Arena 2014.
Los valencianos no solo llaman la atención a la hora de clasificar su música, sino desde el primer momento de montaje, comenzó a cautivar al público gracias a su escenografía: Calaveras, pinchos en trincheras de vieja madera, y una cuidada y fiera armadura, además de ropajes guerreros caracterizan el escenario y vestuario de la banda.
Los más fieles a la banda saben, que nunca suelen decepcionar en sus directos en lo que a sorpresas y dinámica se refiere, y nuevamente, volvieron a destacar con el movimiento incansable de su cantante conjuntamente a su gran efusividad para con el público, como pudimos observar al presentar los temas clásicos y nuevos de la banda, a pesar de que muchos no consiguieron identificarlos hasta el inicio de los mismos.
Otro punto destacable de su actuación, además de su escenografía y vestuario, fue la inclusión en este festival de uno de los espectáculos clásicos de sus directos, en el cual nos demuestran la fiereza e ira de sus temas.
¿A que nos referimos? Sin duda al espectáculo que daba comienzo a través de los instrumentistas de la banda cuando sorprendieron al público escupiendo sangre real al cielo como preludio de la aparición de Beleth (Cantante de la banda) cubierto de la misma y escenificando a su vez, como se arrancaba su propio corazón, mordiéndolo, para finalizar lanzándolo a un sorprendido y excitado público que en su gran mayoría no conocía a la banda.
Por lo que en conclusión, podemos prácticamente asegurar, que los valencianos salieron de nuestras tierras con un buen sabor de boca al finalizar prácticamente sin incidencias reseñables (a pesar de la ausencia de la caja en la mezcla de sonido) y sorprendiendo y animando a un público no tan aficionado al género y que comenzaba a tomar posiciones ante la llegada del cabeza de cartel.
Saurom.
Tras la dureza de Noctem y la rudeza demostrada durante el festival a partir del concierto de los alicantinos Edhellen, tenemos como contrapunto final al famoso cabeza de cartel: Saurom.
El sonido mas folk y fresco de los gaditanos ofrecía un respiro final a un festival cargado de emoción para sus fans.
La distribución del escenario a la vez que el público tomaba posiciones, se volvió aun más expectante al ver situadas máquinas de fuego y pequeña pirotecnia.
¿Que nos tendrían preparados estos juglares?
Desde la primera nota, dando la apertura con una de sus intros del disco: Once Romances desde Al Andalus, comenzó el espectáculo continuando con una introducción no cargada de desventuras, ya que Zaluster no acompañó al sonido inicial de las guitarras ni al bajo en el primer tema que nos dedicó la banda.
¿Esto frenó la andanza del espectáculo? ¡Ni por un momento! Siendo prácticamente inapreciable para los juglares menos expertos que acompañaron con sus vítores al conjunto durante la totalidad de la aventura.
Por otra parte pudimos disfrutar de un concierto versátil como solo ellos saben transmitirlo, moviendo a su público por las diversas épocas de la banda: Desde » El saltimbanqui» sorprendiéndonos con su versión a violín de las conocidas flautas (Perteneciente a su época más temprana como Saurom Lamderth) hasta los conocidísimos temas de su último álbum de estudio: Vida; como pudieron ser «La leyenda de Gambrinus» «Noche de Halloween» o «Cambia el mundo» sin dejar atrás otros temas de discos como JuglarMetal u otros clásicos de la banda.
Otra nota a destacar y punto a favor de la misma, al no realizar un contraste tan amplio con la progresión de la noche, fue la de incluir muchos más temas de su álbum Maryam de lo que quizás su público más fiel pudiera estar acostumbrado, ya que el mismo denota una época mas oscura y menos folk del grupo; siendo destacable a su vez el importante papel tomado por las guitarras en este concierto, dándonos versiones muy interesantes y raramente oídas de sus temas mas clásicos y populares, mimetizando ese lado más folk por uno mas potente sin perder la magia que les caracteriza.
Pero si en algo ayudó Zaluster a estos juglares, fue en dejar con la boca abierta a su público con el espectáculo pirotécnico desde el primer tema, aplicando la nota de color y calor a la entrega, el baile y el cantar, que demasiado pronto finalizó lo que muchos buenas horas hubieran alargado.
Y con un castillo de fuegos artificiales unido a la pirotecnia de escenario, los excitados ojos del público y sus interminables ganas de fiesta y una canción más por parte de los gaditanos, y de muchos clásicos que quedaron en el tintero; finaliza un Rock Arena que no nos deja para nada indiferentes y que aproximan aun más si cabe a este municipio alicantino a ser uno de los mas aclamados por un festival en continua evolución, que pese a sus dificultades presupuestarias, cierra sus puertas de manera muy positiva y más que acertada.
¿Esperando ya un nuevo Rock Arena 2015?